PRIVILEGIOS QUE USTED FINANCIA

VOXPRESS.CL.- Nadie, nunca, ha negado la trascendental influencia de la producción de cobre en el desarrollo económico del país. Por ello, hace años atrás, cuando aún éramos sólo 'cobredependientes' se acuñó aquella manida expresión del "suelo de Chile".
Hoy, dicho metal continúa siendo gravitante en la economía, pero ya sólo en un 50%, y el Estado jamás ha estado al borde del desplome por alguna baja en su precio, aunque sí lo resiente.
En tiempos en que el cobre efectivamente fue sostén casi exclusivo de las finanzas nacionales, los trabajadores de CODELCO pasaron a disfrutar de un estatus privilegiado dentro del mundo laboral chileno. Junto con la politización de esa masiva fuente de empleos, los salarios y beneficios de sus operarios pasaron a ser de otro mundo, respecto de la generalidad.
Comparativamente, los trabajadores de CODELCO son riquísimos respecto a la mayoría --o casi totalidad-- de los de otros sectores. Un ejemplo: proporcionalmente a su población, Calama es la ciudad con mayor número de vehículos SUV en el país, los que se renuevan cada vez que la División Chuquicamata paga millonarios bonos por 'término de conflicto', conflicto que casi nunca existió.
Antiguamente, los trabajadores de CODELCO atribuían sus privilegios a lo riesgoso de su labor extractiva. De hecho, en la década de los 50, un alud sepultó a decenas de mineros en el campamento de Sewell, explotado por la privada Braden, hoy El Teniente.
No obstante, las rigurosas medidas de seguridad en las grandes compañías anularon los peligros y facilitaron las faenas, totalmente al revés de los pirquenes y de las pequeñas empresas, donde los trabajadores se tutean con la muerte diariamente.
Los empleados cupríferos --al menos, los estatales-- cuentan con el handicap de 'apitutar' en sus empresas a sus parientes, asegurándoles, así, los mejores ingresos del mercado laboral en Chile. Mientras ellos viajan en sus flamantes coches a sus casas de veraneo, el resto de los trabajadores, con suerte, tiene acceso a una playa por un par de días, apretujados con sus familias en precarias habitaciones de costo mínimo.
Cuando el precio del cobre mejora, los trabajadores presionan para que los bonos sean superiores, siendo que esa buena cotización se debe a un mayor poder comprador externo, fundamentalmente por parte de China. Si el valor del metal está a la baja y la producción engrosa los stock, ellos igual exigen sumas importantes como recompensa, incluso no quedando un solo excedente que aportar al Fisco. Ganan siempre, en las buenas y en las malas.
Pero no es todo: acaba de detectarse otro paquete de privilegios adicionales para los dirigentes sindicales de Chuquicamata, los que, coincidentemente, corresponden a los cuatro años del Gobierno de Michelle Bachelet.
Quedó al descubierto la obligatoriedad de la empresa de pagarles UF 100 a los dirigentes para 'capacitarlos' en el paso de minera abierta a subterránea, o, en su defecto, compensarles sus reubicaciones de faenas o el egreso si es que no eran necesarios para el nuevo tipo de explotación.
Esos beneficios --o sea, privilegios-- los firmó Recursos Humanos de la División con los Sindicatos en un "Acta de Acuerdo de Desarrollo Sindical"…, más claramente explicado, de "bienestar personal".
Al tanto de que este tipo de arbitrariedad sería rápidamente detectado por las nuevas autoridades de este Gobierno, el Directorio encabezado por Óscar Landerretche (PS) y en vías de salir, decidió eliminarla. Ello tuvo de inmediato una víctima: los sindicatos de Chuquicamata hicieron saltar de su puesto a Raimundo Espinoza, el compañero presidente de la Federación de Trabajadores del Cobre (FTC), quien es parte del Directorio de la cuprífera estatal. Los sindicatos lo acusan de no haber luchado por la extensión de los beneficios.
Ahora que se marcha, el Directorio de CODELCO quiere hacerlo con sus manos limpias y solicitó a las gerencias de todas las divisiones un detalle de otros dos privilegios de que gozan los dirigentes sindicales: número y costo de sus viajes al extranjero y el nombre de todos los familiares directos que han colocado en las diferentes mineras de la empresa.
No es la mejor señal el que un Directorio de la más grande empresa estatal esté en desconocimiento de beneficios a favor de sus sindicatos, y que recién ahora esté solicitando antecedentes para conocerlos.
Da la impresión de que, al menos esta administración de CODELCO, se ha preocupado exclusivamente de sus propios beneficios, con ingresos muy superiores a todos los directorios de empresas del sector privado.
Todos estos privilegios los paga usted. No lo olvide.