TVN, UN MENDIGO CON SOCIO CONTAMINADO
En las manos de la Cámara por estos días y de la Contraloría General de la República a futuro, se halla la modificación a la ley sobre TVN y que permite la capitalización de la estación pública en casi US$ 50 millones para salvarla de la quiebra.
En una de las peores administraciones de su historia, TVN bajo la dirección ejecutiva del economista socialista Ricardo Solari, llegó en sólo cuatro años a niveles inauditos de endeudamiento. El canal, además, está último en el ranking de sintonía.
Originalmente, Solari le pidió al Gobierno una capitalización de casi US$ 90 millones, pero frente al descabellado déficit fiscal por responsabilidad de la Presidenta, ésta accedió a que el salvataje fuese sólo por “una cantidad menor”, alabada por la ministra vocera como “un ejemplo de austeridad y buen manejo de los fondos públicos”.
Como ni la Nueva Mayoría estaba de acuerdo en girar tan asombrosa cifra a un barril sin fondo, la ministra Narváez dejó los pies en las alfombras del Congreso, dando vueltas a parlamentarios afines y haciendo lobby para que Ricardo Solari contase con el flotador que le permitiera seguir subsistiendo.
A la postre, con el unánime rechazo de la oposición y con 21 votos oficialistas se aprobó la capitalización, sin siquiera conocer una sola explicación de Solari sobre la debacle y sin el menor arrepentimiento de éste como causante directo de la crisis, dicho esto por los propios trabajadores de la estación.
El único argumento ‘oficial’ fue que para poder competir en una “industria cada vez más compleja” es necesario modernizar la empresa. El ‘independiente’ senador Guillier, que en un principio rehusó apoyar tamaño desembolso, se dio una voltereta a cambio del la promesa ---eso no más— de que se potenciarían las señales regionales…
Los impulsores del salvavidas, partiendo por la propia Presidenta, adujeron que “es natural” que el “canal de tofos los chilenos” sea financiado “con plata de todos los chilenos”.
Hay que recordar que el ex ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, antes de renunciar archivó la carpeta con el proyecto. No había recursos para materializarlo.
Pero si ya resulta irresponsable pasarle dinero a un inepto administrador de fondos públicos, es aún más censurable que no se tenga en consideración, en nombre de “todos los chilenos”, que TVN tiene sociedad con una televisora transnacional acusada ante el mundo de soborno a la FIFA.
Mediante un recién renovado contrato de prestación de servicios, TVN otorga sus instalaciones y apoyo logístico, técnico y humano a la cadena Fox Sport, a cambio de US$ 3 millones anuales.
TVN le cede a Fox Sport un estudio, oficinas, equipos, directores y personal técnico, y ahora le facilitará infraestructura móvil para transmisiones desde los estadios. La cadena internacional, sospechosamente, parece “estar segura” de que se adjudicará la licitación de la venta del CDF (Canal del Fútbol).
La Asociación de Fútbol asegura “estar monitoreando” lo que resuelva la justicia norteamericana sobre el delito de soborno en que incurrió Fox Sport para adquirir a la FIFA derechos de transmisiones.
Ocurre que Alejandro Burzaco, ex director general de la empresa de marketing deportivo Torneos y Competencias, declaró ante un juez de Estados Unidos que Televisa, Fox Sports y Globo pagaron sobornos para ganar los derechos televisivos de competencias de futbol internacional.
Burzaco ---arrestado en EE.UU. desde 2015-- es testigo en un juicio en contra de ex dirigentes de futbol, entre ellos, el chileno Sergio Jadue, acusados tras una amplia investigación internacional por corrupción en la FIFA.
Cuando el fiscal Sam Nitze le preguntó qué esperaba ganar Fox Sports al quedarse con los derechos de transmisión, Burzaco respondió: “usarlos para expandir su señal en toda América, desde Argentina hasta Estados Unidos”.
Es el primero de varios testigos que se han declarado culpables y que están ofreciendo sus testimonios en el juicio por corrupción que se lleva a cabo en Brooklyn, Nueva York.
Burzaco, un ex ejecutivo de inversiones del Citigroup, declaró que pagó millones de dólares en sobornos como jefe de la productora de televisión deportiva, incluyendo a ex dirigentes del fútbol sudamericano, también enjuiciados, entre ellos Jadue.
El escándalo mancha rotundamente a TVN, por dos motivos: uno es ético, porque una empresa pública financiada con dineros fiscales no puede estar asociada con otra acusada de soborno, y porque --aún más sensible— presta soporte humano y técnico a una competidora directa para su propia área deportiva.
Este ‘detalle’ –ignorado por los parlamentarios— explica con claridad la visión empresarial de Solari y da luces del porqué llevó tan vertiginosamente a la ruina al canal. Pidió recursos públicos para poder competir, pero no sabe ni quiere competir.
